Ella es Nicole Aguilar (@nicoltrumpet), tiene 20 años y toca trompeta. “Soy del Táchira, de La Grita. Comencé en la música a los 14 años, cuando estaba en octavo grado”, me contó Nicole. “Mi hermano era percusionista en un núcleo de El Sistema. Yo nunca faltaba a sus conciertos, y un día le dije a mi mamá que quería estar en la orquesta. En un principio quería tocar violín, pero no había profesor de la cátedra. Luego quería tocar oboe, pero tampoco pude porque en ese momento no había cañas. Cuando el coordinador del núcleo me vio indecisa se ofreció a mostrarme los diferentes instrumentos.
En este paseo, vi un ensamble de trompetas ensayando. El color y la forma del instrumento me llamó mucho la atención, y su sonido me enamoró, así que le dije a mi mamá que eso era lo que quería tocar”, me explicó. “A veces me pongo a pensar, y creo que si no hubiese sido músico, quizá me hubiese desviado o algo así. A nivel personal la música me ha enseñado muchísimo, porque he podido compartir con muchas personas y la cantidad de cosas que puedes aprender de todos ellos, con cada una de sus historias es increíble”, culminó Nicole explicando la enseñanza que le ha dejado la música.
El texto y la foto son de @carlosvargasovalle, uno de nuestros percusionistas, quien, inspirado en las Historias de un vecino, de Donaldo Barros, decidió hacer también las historias de un músico. Porque todos, todos, tienen algo que contar…